A la hora de encarar una reforma de cocina en nuestro hogar puede surgirnos una pregunta importante, ¿renovar la cocina en su estancia o hacer trabajos para conseguir una cocina abierta? Bien es cierto que la idea de abrir una cocina puede suponernos algunas dudas por el trabajo que puede implicar y por el cambio visual que se dará en la vivienda.
Sin embargo, decidirse por una cocina abierta puede conllevar mejoras tanto visuales como prácticas en la estancia. Cada vez es más común que en las casas de obra se construyan así, mientras que en muchas reformas integrales es común apostar por una cocina abierta. Por ello vamos a comentar algunas de las ventajas o beneficios que una cocina abierta puede aportar a nuestro hogar.
Mayor espacio visual
Uno de los cambios más evidentes será el mayor espacio que se conseguirá. Ya esté anexa al salón o al pasillo, optar por una cocina abierta ampliará con creces el espacio visual, consiguiendo una vivienda con mayor movilidad y sensación de amplitud. A la hora de escoger los acabados de los materiales de la cocina, éstos irán en sintonía de la imagen general de nuestra casa, por lo que también habrá mayor homogeneidad en el estilo.
Teniendo una cocina abierta puede surgir el temor de que los olores se desplacen hasta las zonas comunes, pero actualmente el mercado ofrece todo tipo de posibilidades para que esto no ocurra.
En este caso contar con una campana extractora que ofrezca las mejores prestaciones será fundamental. Además, también podremos escoger entre todo tipo de modelos, por lo que podrá estar en sintonía con el estilo decorativo general.
Diferentes distribuciones
Otro de los puntos fuertes de decantarse por una cocina abierta es que podremos optar por varios tipos de distribución, sin tener que ceñirnos a uno por el espacio cerrado y disponible. Por ejemplo, en una cocina abierta podremos decantarnos por una distribución lineal, ubicando los elementos de cocina alejados de la parte abierta y consiguiendo mayor espacio físico.
Articulo procedente: Plan Reforma
