A veces cambiar el aspecto de una estancia es tan fácil como variar alguno de los detalles. Cambiar las puertas de casa es un buen ejemplo de cómo podemos aportar un nuevo estilo a una habitación, simplemente reformando una de sus partes.
En otras ocasiones, planificamos una reforma integral y aprovechamos para cambiar puertas desgastadas, o que han pasado de moda. En cualquiera de los casos, cambiar las puertas de casa siempre es buena idea en una reforma, en este post te damos algunos consejos para que aciertes.
Tipos de puertas para viviendas
Hay muchas formas de dividir los tipos de puertas disponibles en el mercado. Por su uso, distinguimos puertas abatibles, plegables y correderas, por su fabricación pueden ser macizas o huecas, también pueden ser lacadas, pintadas, de madera natural, etc.
Si lo que vamos a cambiar es la puerta principal de la vivienda, es importante distinguir entre los distintos tipos que existen:
Acorazada: Disponen de un panel de chapa y son extremadamente seguras.Blindadas: Tienen dos chapas de hierro en su interior, son algo menos seguras que las acorazadas, pero suelen resistir en caso d ser forzadas.
Macizas: Se trata de puertas de madera de estilo rústico habitualmente.
Metálicas: Se fabrican con dos chapas de acero y un interior de poliuretano.
Debes tener en cuenta el material y sus dimensiones a la hora de solicitar un presupuesto.
Consejos para cambiar las puertas de casa en una reforma
Nuestro primer consejo es que no lo hagas tú mismo. Una puerta debe quedar bien colocada, al fin y al cabo, es posible que nos acompañe durante décadas, por eso el trabajo debe ser muy preciso, evitando roces y zonas desencuadradas.
Ten muy en cuenta el color. A veces solo nos damos cuenta de que una puerta no combina cuando ya está instalada. Una puerta tiene una función práctica, pero también forma parte de la decoración.
Cristal, madera, remates…, ten muyen cuenta los materiales, porque van a ser determinantes a la hora de establecer el precio final.
Planifica también la instalación que acompaña a la puerta, es decir, los marcos, bisagras, y todos los acabados que quieras incluir.
No te olvides de medir. A pesar de lo que pueda parecer, no existe una medida única estándar para todas las puertas de viviendas, de hecho, cada puerta es única, ya que se adapta a su entorno, así que sé muy preciso al medir para que la instalación sea perfecta.
Articulo procedente de: vipreformas.com
